Los cambios en el estilo de vida también son claves para prevención secundaria
En prevención secundaria es importante, además del tratamiento farmacológico, preferiblemente en pauta combinada, seguir cambios en el estilo de vida, centrados en una correcta alimentación y en el ejercicio físico
En pacientes con dislipemia, independientemente del nivel de riesgo, hay que comenzar con recomendaciones de cambio de hábitos vida para conseguir bajar el riesgo cardiovascular, luego ya se iniciará el tratamiento farmacológico. Para ello, es importante seguir una dieta baja en calorías, reducir las grasas…